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12 de Julio
Si estás buscando tips de organización, si llevas meses intentando mejorar tu alimentación o si sientes que el tiempo no te alcanza: ¡Este artículo es para vos! Es hora de que dejes de comer el primer enlatado que se te atraviese en la cocina sólo por falta de tiempo; acá te contamos qué es el meal prep, cómo hacerlo y te daremos algunos consejos útiles que te ayudarán a mejorar tus hábitos con un plan de almuerzo semanal.
Es una preparación de comidas que, comúnmente, se realiza una vez a la semana para que puedas tener en tu despensa alimentos listos, que te ahorren tiempo y te faciliten la vida durante esos días donde los deberes no parecen terminar.
Podes realizar esta preparación el día que te quede más fácil o en el que tengas algún espacio libre; sin embargo, lo recomendado es hacerlo justo cuando hagas las compras, para que los alimentos estén frescos y así puedas optimizar mejor el tiempo.
Intentá dejar listas algunas preparaciones que duren más tiempo en tu nevera y que, normalmente, no consumes porque te da pereza hacerlas, por ejemplo, si te gustan algunas legumbres como los garbanzos, las lentejas o las arvejas, puedes dejarlas cocinadas desde el día de meal prep para que cuando las vayas a consumir sólo las tengas que calentar.
Así mismo, con algunos cereales como el arroz o la quinoa. También con las proteínas; lo ideal sería que dejaras ya tus carnes adobadas en un recipiente, de manera que para prepararlas sólo tengas que ponerlas en cocción y esto no te tome gran tiempo.
Dejá también tus frutas y verduras lavadas y desinfectadas, para que al momento de consumirlas ya estén listas y frescas… la forma de almacenarlas también tiene que ver mucho con su conservación, así que procura que estén en recipientes herméticos y con toallas de papel que ayuden a absorber el agua para que te duren más tiempo en tu heladera.
Cuando ya tenes tus comidas preparadas y un plan de alimentación bien estipulado, es más difícil que acudas a alimentos poco nutritivos, porque usualmente lo que nos hace fallar en los hábitos saludables, es la pereza.
Un buen plan de almuerzo semanal te facilitará la vida y no sólo será beneficioso para tu salud, sino también para la optimización de tu tiempo y para tu bolsillo, porque al tener comidas preparadas y planificadas, tendrás menos ganas de pedir a domicilio.
Si queres empezar en este mundo de una alimentación más saludable, consciente y que involucre menos tiempo, acá te damos algunos tips para tu plan de almuerzo semanal:
Principalmente, pensá en las comidas que te gustan, no hagas que tu alimentación sea aburrida o que te genere estrés; planifica un menú que además de disfrutar, te nutra.
Antes de realizar las compras anotá qué es lo que necesitas según lo que vayas a comer durante la semana, esto para evitar compras innecesarias.
Procurá incluir en tus planes buenas porciones de vegetales, proteínas y carbohidratos. Si ya preparaste arroz en tu meal prep y dejaste el pollo y la carne adobando, entonces en tu menú tendrás solucionados muchos almuerzos de la semana.
Para evitar que te confundas o que algunos alimentos que ya están listos, lleguen a dañarse, anota el plan de comidas en una hoja; es decir, apuntá todos los días de la semana y planifica qué comerás cada día para que así sepas qué te hace falta, qué debes comprar y qué debes cocinar.
Para que no te excedas y evites desperdiciar comida, debes medir lo más exacto posible las cantidades que se consumen en tu hogar de manera semanal. Si se consume media libra de arroz diaria, entonces haz la conversión de cantidades para que no prepares de más.
Por otro lado, si debes comer fuera de casa, ya sea porque es día de oficina o tienes que ir al colegio o a la universidad, podrías entonces dejar las porciones ya servidas en los recipientes para transportarlos.
Si estás en casa, podes lavar y secar algunas verduras de hojas como la lechuga y espinaca. También es importante que varíes las fuentes de proteína, entonces deja adobando el pollo y la carne; así mismo, deja el arroz y las pastas ya cocinadas en la nevera para que se conserven mejor y sólo tengas que calentar después.
Si debes llevar el almuerzo a tu trabajo o estudio, entonces anotá estas ideas de meal prep:
Pasta con mix de verduras y pollo: Cociná la pasta de tu preferencia, así como vegetales de fácil conservación (brócoli, zanahoria y cebolla), sírvelo y añade el pollo desmechado o fileteado.
Ensalada de garbanzos: Remojá y cociná los garbanzos para después freírlos con especias y, al final, añádele verduras al gusto. Lo puedes acompañar con otra fuente de proteína como un huevo cocido.
Arroz al wok: Cociná el arroz y llevalo a una sartén diferente para agregarle salsa de soya, verduras fileteadas delgadas y carne en tiras cocinada.
Recordá que todas estas preparaciones se deben conservar bien cerradas en la heladera y a la hora de consumirlas las puedes calentar.
No hay reglas absolutas, así que buscá el meal prep que a ti más te funcione e incluye los alimentos que más disfrutes.
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