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Te sorprendería saber que hay tantas formas de pezones, ¡como mujeres en el mundo! Porque en sí, todas somos diferentes y -por supuesto- tenemos detalles que nos hacen únicas Entre Nosotras. Hay quienes tenemos senos más grandes, y otras que contamos con senos más chiquis: pero todos igual de hermosos y perfectos… y así mismo sucede con nuestros pezones.

Los pezones, que son parte esencial de Nuestro Cuerpo -y sobre todo de nuestras glándulas mamarias- tienen la función no sólo de la lactancia, sino también de darnos un increíble placer al estimularlo, junto con la areola. 

Seguramente, ya estás tan enganchada como Nosotras a este tema; así que, ¿qué te parece si nos acompañas a conocer los tipos de pezones, según su forma y su color? Un aspecto que te ayudará a conocerte y a amarte ¡muchísimo más! 

¡Aprendamos!

Formas de los pezones 

Tenemos la costumbre de clasificarlo todo y el caso de los pezones, no es la excepción. En el mundo podemos encontrar características similares que nos hacen darle un nombre, según su forma -porque claro está- los hay de diversas formas: grandes, pequeños, planos, invertidos, cortos, largos ¡y muchos más!

Primero, aprendamos la teoría. Según el portal web del Dr. Alberto Marina, en su blog Tu Aumento de Pecho, encontramos estas formas de pezones más comunes:

Pezones comunes o “normales”

Estos son los que tienen una forma natural y los pudimos haber visto alguna vez en revistas o en nuestras clases de anatomía del colegio. Los pezones comunes sobresalen naturalmente de la areola, se ponen un poquito duros cuando los tocas o se enderezan cuando hace mucho frío (algo parecido a lo que pasa con la erección del pene). Si los tienes así, ¡a que alguna vez te ha pasado! 

Pezones planos o cortos

Como su nombre lo indica, éstos son más planos y -normalmente- no sobresalen de la areola, excepto cuando los estimulas. Se mantienen a ras y esto puede afectar un poco el proceso de la lactancia, sin embargo con paciencia y algunas técnicas, ¡no será nada difícil lograrlo!

Pezones invertidos

También existen y no tienen nada de extraño; por el contrario ¡son hermosos! Sabemos que a algunas nos acompleja pero hay mil y una técnicas para lograr obtener dicha protuberancia. Si tus pezones son invertidos y no te sientes cómoda con ellos, puedes visitar a tu médico de confianza y consultar todas las alternativas para estos casos. Ten en cuenta que entre las formas de pezones, estos difícilmente se endurecen con la estimulación.

Pezones pseudoinvertidos

Los pezones pseudoinvertidos comparten algunas características con los invertidos; con la única diferencia de que al estimularlos o tocarlos estos brotan de la areola y se endurecen con facilidad. Algunas mujeres que amamantan a sus bebés, pueden tener algunas dificultades al momento del agarre, pero con la estimulación y práctica diaria, o incluso con el uso de formadores de pezones o extractores de leche, ¡se puede lograr!

Pezones unilaterales

Se trata de un pezón invertido y el otro con una apariencia más plana o natural. Esta es una de las formas de pezones menos comunes, así que si tú la tienes, ¿por qué no sentirte privilegiada? Para estos casos también hay soluciones que puedes aplicar, pero lo ideal es visitar primero al especialista. 

Pezones grandes 

Así como hay pezones pequeños, que se camuflan con la areola, los podemos encontrar grandes y protuberantes; de hasta 1,2 o 2,3 centímetros de diámetro ¡y son completamente normales! Pues a aún con su tamaño, no comprometen nuestra salud. 

En el caso de las mamás que deben alimentar a sus bebés, lo recomendable es esperar a que los pequeñines estén un poco más grandes para que se sientan cómodos al succionar; pero en la maternidad, así como en la vida, todo es cuestión de ensayo y error, así que nada pierdes si lo intentas al principio, siguiendo la recomendación de un profesional. 

Pezones con vellos 

O como los conocemos muchas de Nosotras: “pezones peludos”, porque -aunque te sorprenda- o nunca los hayas visto, ¡los hombres no son los únicos que los tienen! Los vellos suelen situarse alrededor de la areola y, al igual que los anteriores, tampoco demuestran que haya algo “anormal” en nuestro cuerpo. Es tu decisión si los quieres conservar contigo o si los quieres quitar; lo que decidas estará bien. 

Pezones supernumerarios

También son llamados “pezones accesorio” o “tercer pezón”. Se trata de un pequeño pezón extra que podría llegar a ubicarse en la espalda, en la axila, en el cuello, e incluso en nuestra vulva. Estos, al igual que los pezones comunes, tienen cambios fisiológicos y patológicos, por ende, nuestra recomendación es que visites al mastólogo, quien podrá decirte si es mejor tratarlo, extirparlo o -si no compromete un riesgo para tu salud-conservarlo.

Pezones con glándulas de Montgomery o “areolares”

Estos son pequeños puntitos alrededor de la areola y, según una nota publicada por el blog Eres Mamá, la cantidad de glándulas pueden variar de una mujer a otra, así como su tamaño; ya que podemos tener entre 10 o 20 tubérculos de Montgomery en cada uno de los senos. 

Estos cumplen una función muy importante de lubricación y protección contra infecciones. También, en el proceso de lactancia, ayudan a aumentar el apetito del bebé, a través de estímulos olfativos. 

Fascinante, ¿no? Definitivamente, cada parte de nuestro cuerpo esconde secretos maravillosos que nos hacen realmente únicas. 

Aquí te dejamos una infografía que puede ayudarte aún más a distinguir las formas de los pezones, e identificar cuáles son los tuyos.

Colores diferentes en los pezones 

No sólo es la forma de nuestros pezones lo que nos hace diferentes e irrepetibles, pues también al hablar de tipos de pezones, ¡hablamos del color que los caracteriza! 

Los pezones pueden ser rosados, rojizos, cafés, marrones… de muchos tonos. Además, es normal que no se mantengan iguales durante toda la vida, por ejemplo, durante la pubertad, el embarazo, la menopausia y los cambios hormonales, pueden tornar de un color a otro. ¡Es lo que debe pasar! Lo que sí es normal, es que estos sean un poco más oscuros que la areola o el tono de nuestra piel, en general. 

Y qué importa si son grandes, pequeños, rosados o cafés; ¡examínate, conócelos y ámalos! Así podrás también detectar a tiempo cualquier anomalía que se convierta en señal de alerta para visitar al especialista. 

En Nosotras queremos que te quede súper claro que siempre puedes contar con este portal para obtener información de valor sobre tu cuerpo, salud, sexualidad y sobre relaciones. Puedes entrar a nuestro consultorio ginecológico online para resolver todas las dudas adicionales que tengas.

Fuentes

https://tuaumentodepecho.com/tipos-de-pezones/

https://eresmama.com/tuberculos-montgomery/

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