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10 de Septiembre
La vulva, a menudo confundida con la vagina, es la parte externa de los genitales de la mujer. Está compuesta por los labios vulvares mayores y menores, el monte de Venus, el clítoris y el meato uretral. Cada una de estas partes cumple funciones de gran importancia, como la protección y el placer.
Es crucial comprender que todas las vulvas son diferentes y únicas en su apariencia. Algunas pueden ser similares, muy similares o diferentes entre sí.
¿Conocés tu vulva? ¿Has dedicado tiempo a observarla detenidamente?
Durante muchos años, hablar de la sexualidad femenina fue un tabú. Sin embargo, en las últimas décadas, esta barrera se ha ido desvaneciendo gradualmente, y ahora es tan común y frecuente hablar sobre la sexualidad y el placer de las mujeres como lo es hablar sobre el placer y la sexualidad de los hombres.
Debido a que durante muchos años no se mencionó correctamente lo que ya tenía nombre, cada familia solía designar a la vulva con la terminología más aceptada en su sociedad, de acuerdo con las costumbres y tradiciones del lugar, utilizando términos como ¨cola de adelante¨. ¨pochola¨, ¨vagina¨, ¨chocho¨, ¨coño¨, ¨conejo¨, entre otros. Sin embargo, hoy en día sabemos que vulva y vagina no son sinónimos. Veamos cuáles son las diferencias.
La vagina, es un canal fibromuscular que comunica al cuello uterino con el exterior, permitiendo la salida del flujo menstrual. Además, forma parte del canal de parto para que pueda ocurrir un nacimiento.
También se la considera un órgano para la cópula ya que proporciona contención al pene durante las relaciones sexuales con penetración vaginal.
La Vulva es la parte externa de tus genitales y está formada por:
Su porción visible llamada glande, que corresponde tan solo a una pequeña parte, está ubicado por encima del meato uretral y su función es la de brindarle placer a la mujer, para ello cuenta con más de 8000 terminaciones nerviosas sensitivas.
Es una prominencia de tejido adiposo recubierto por piel y vellos, su función es la de proteger al hueso pélvico.
Rodean la entrada a la vagina protegiéndola. Además poseen glándulas sudoríparas y sebáceas. Los labios mayores suelen estar recubiertos por vello en su parte externa.
Es un pequeño orificio, donde finaliza la uretra y permite la salida de orina.
Cada vulva es única y no existen dos iguales, hay tantas vulvas diferentes como caras distintas en el mundo. Algunas vulvas pueden tener labios mayores de piel más oscura o más clara, labios menores y mayores de diferentes longitudes, monte de Venus con más o menos tejido adiposo, y vello púbico con distintas características como rizado, lacio, rubio, castaño, moreno o pelirrojo.
Todas estas características se combinan para dar origen a las diversas formas de vulvas, y todas ellas son normales, no hay una vulva ¨correcta¨o ïdeal¨.
Conocer tu propia vulva es importante para tu salud y bienestar. Observarla con un espejo puede ayudarte a familiarizarte con su apariencia y características únicas. Esto te permite detectar cualquier cambio inusual, como la aparición de lunares, lesiones o irritaciones, lo cual es fundamental para mantener una buena salud vulvar.
Además de su importancia para la salud, explorar tu vulva y entender cómo responde a diferentes estímulos te permitirá descubrir tus zonas más sensibles y disfrutar del placer sexual de manera más plena. Cada mujer tiene sus preferencias y sensibilidades únicas, y el autoconocimiento es la clave para una sexualidad saludable y satisfactoria.
Acordate que tu vulva es una parte natural de tu cuerpo. No debés sentirte avergonzada ni compararla con estándares irreales. Celebrá la diversidad y aprendá a amar y aceptar tu propia vulva tal como es.
Conocer y entender tu vulva es fundamental para tu salud y bienestar sexual. Apreciá y aceptá tu vulva tal como es, ¡es parte de tu belleza individual!
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